El desayuno de los campeones

Queridos escrotines de todo el mundo y parte de Europa no puedo irme para cama (y debo irme ya) sin hablaros de una cosa en la que acertamos totalmente en nuestro viaje londinense. Y fue lo siguiente, en dos palabras: llevamos Colacao.
El Colacao ha sido, es y será el mejor acompañante de la leche de toda la historia y yo respeto todas las opiniones de todo el mundo, pero quien diga lo contrario he de decir que quizá pierda unos puntos conmigo. Todo heroe tiene su antiheroe y en este caso es el puto Nesquik que son unos polvos insípidos de los cuales necesitas como un kilo de ellos para parecer que no bebes leche directamente de la tetilla de la vaca.
Pues bien, ¿qué pasó? que llevamos un gran bote de Colacao a Londres y como no, hubo gente que nos pedía si les podíamos dar un poco (para más cosa justamente también eran de Vigo, es decir, estamos en una ciudad de 4 millones de habitantes y justamente las personas que nos piden Colacao en nuestro hostal son españoles que de entre esos 40 millones precisamente son de Vigo, para que después digan que el mundo es un pañuelo...).
En la historia creo que he perdido la cuenta de aparatos, inventos e ingenios que ha sacado Colacao cada año (el que parecía un ventilador para remover la leche, el que parecía unas maracas...) y es que siempre ha ido evolucionando pero manteniéndose fiel a su sabor (por lo menos el Colacao original), ya que he de decir que el Turbo a mí no me triunfa nada, donde estén unos buenos grumos que se quite el resto, de hecho es un ritual con mi leche fría en la que se generan miles de piedrecitas de Colacao que después me voy comiendo una a una con mi cuchara... (es que ya me babeo solo de pensarlo).
Ahora han puesto los monigotes éstos de colorines con nombres raros y con trompas que más que atraer a los niños yo creo que los asustan, por lo menos a mí lo hacen...
Vamos que podría contar muchas más cosas del Colacao con el que llevo toooda mi vida desayunando y que no tengo pensado dejar por nada del mundo, lo que pasa es que estas horas en las que debería estar en cama el cerebro no funciona del todo bien.
Saludos de Escrotín.


Y como hace tiempo que no os pongo por aquí ningún corto os muestro aquí uno de un tío muy sabio, para bajarlo solo teneis que meter vuestra dirección de correo y lo bajais no hay que registrarse ni nada, a lo mejor después os llega publicidad de notodofilms pero tampoco está tan mal es sobre cine y libros.

El mecanico de Raikonen.